Ritos funerarios | Hannah Kent

9788484289715

Ritos funerarios es una novela de las que marcan, de las que dejan huella, de las que se hacen especiales página a página. Para mi, la lectura de esta novela fue muy especial, y aunque pase el tiempo, no me puedo olvidar ni de la historia ni de su protagonista, Agnes. Esta novela está basada en una historia real, la historia de la última mujer decapitada en Islandia, acusada del brutal asesinato de dos hombres. Nos encontramos en Islandia en el siglo XIX y somos testigos de cómo es la vida de Agnes mientras espera la hora de su ejecución. Es confinada en la granja de un matrimonio y de sus dos hijas, la familia está totalmente horrorizada y no quieren ni hablar con ella. La única persona que quiere tener contacto con ella es el joven ayudante del pastor, intenta comprenderla y pretende salvar su alma. A medida que más conversa con Agnes más grande se hace el dilema: ¿fue Agnes culpable de los terribles hechos de los que la acusan? ¿O fue inocente pero no tiene una buena manera de demostrarlo?

No solo estamos ante una novela que marca y deja huella, sino que estamos ante una novela que hace pensar y reflexionar al lector. ¿Cuántas personas han sido culpadas de algo de lo que son inocentes a lo largo de la historia? ¿Cuántas personas a lo largo de la historia han sido ejecutadas sin tener que serlo? ¿Cuántas personas a lo largo de la historia han sido juzgadas por algo que no han hecho? Sinceramente, es un tema en el que he pensado muchas veces, porque en este mundo hay muchas injusticias, pero desde que he leído esta novela no puedo parar de darle vueltas al tema. Con este tema la novela te remueve totalmente por dentro y hace que te comas la cabeza, por lo menos es lo que a mi me ha ocurrido.

«-No es justo. La gente afirma conocerte por las cosas que has hecho y no porque se hayan sentado contigo a escuchar lo que tengas que decir.»

La historia está inspirada/basada en un hecho real. Desde un principio sabemos cómo va a terminar la cosa pero eso no hace que perdamos el interés, todo lo contrario. El lector quiere conocer a la protagonista, conocer su historia y saber si era culpable realmente de lo que se le acusaba. La autora, Hannah Kent, tiene la maestría de crear una historia alrededor de Agnes, intuyendo lo que podría haber sucedido realmente.

La historia está narrada en tercera persona, cosa que me ha parecido un gran acierto ya que así vamos conociendo la historia en toda su totalidad. Además, nos encontramos que esta narración se va alternando con fragmentos narrados por la propia Agnes. En esas partes, la protagonista nos cuenta como está viviendo su situación, y tengo que reconocer que esas partes me han parecido las más especiales. En Islandia no había cárceles y Agnes es trasladada a un hogar. Leyendo las partes narradas por Agnes nos damos cuenta que esta situación no solamente es incómoda para la familia que le tiene que dar cobijo. Ella también se siente cohibida y fuera de lugar, y me ha parecido muy interesante poder leer también su punto de vista. Además, la narración me ha parecido muy descriptiva, está cargada de detalles. Esto hace que el lector se pueda transportar, sin ningún problema, a los lugares que la autora describe: Islandia nevada, los fiordos, la granja en la que es acogida Agnes. A medida que iba leyendo, además de ir imaginando los escenarios, fui buscando imágenes tanto de Islandia como de las casas que va nombrando la autora.

«La traición de un amigo es peor que la de un enemigo.»

Ha sido una lectura que disfruté de principio a fin, pero en ciertos momentos me hubiera gustado que la autora ahondara más en otros personajes. Me encantaría conocer mejor a la mujer de la granja, su papel en la familia y conocer mejor su personalidad. 13239053_235443000167152_4559551519518690244_nLa autora escogió ahondar más en el personaje de Agnes, cosa que no me ha molestado pero he echado de menos conocer un poco mejor al resto de personajes. Al ir conociendo la historia de Agnes es inevitable cogerle cariño, acabas deseando que ese final que ya conoces no ocurra, que no sea real. Conoces su historia desde que era niña, pasando por su infancia, muy dura. Acabas conociendo perfectamente a esa mujer. La autora ha conseguido llevar la historia sin busca de la lágrima fácil, cosa que agradezco. Es una historia dura pero que no cae en sentimentalismos innecesarios. Busca que conozcas a la protagonista, que conozcas su historia, y le coges cariño a medida que la vas conociendo, no porque te lo imponga la autora desde un principio.

Nos encontramos ante una novela que está muy bien documentada, se nota desde un principio que hay mucha investigación detrás. A destacar, me ha parecido un acierto que la autora incluyera ciertas cartas y documentos oficiales que son reales. Esto le da más fuerza a la novela y nos damos cuenta de todo lo que trabajó en ella la autora. Sinceramente, no sé cómo expresar todo lo que he sentido leyendo esta novela, siento que me estoy quedando corta pero me es imposible escribir más sobre ella. Ha sido una lectura de las que dejan resaca, de las que te van conquistando palabra a palabra. Una lectura que te hace pensar y te hace reflexionar durante días. Una lectura que te apasiona tanto por su historia como por su ambientación, y además consigue que le cojas un cariño tremendo a la protagonista. Sin duda es una lectura que recomendaría a todo el mundo y seguro que no fallaría con esa recomendación.

Título: Ritos funerarios | Título original: Buriel Rites | Autora: Hannah Kent | Traducción: Laura Vidal | Páginas: 368 | Editorial: Alba Editorial | Año de publicación: 2013-2014

 

📎 Más reseñas de este libro: A través de otro espejo, Bosque de Marbaden y She can read, she is bad